Ixcuintla

Nombre: Ixcuintla

Identidad: Ninguna

Clasificación: Nahual

Ocupación: Dragón

Familia: Desconocida

Hogar: Ixcuintla

Primera Aparición: Nahual Saga

Ixcuintla es un personaje de leyenda de la ciudad de Santiago Ixcuintla, Nayarit.  En el Georgie World es un personaje de Nahual Saga. 

Inspiración 

En la leyenda del Dragón de Ixcuintla, que cuenta que debajo del cerro donde se encuentra el pueblo, reside un gran dragón custodiando un árbol de naranjas de oro. Dicho dragón habría sido apresado en 1607 por un fraile misionero. 

Georgie World

Nahualcario

Ixcuintla fue el primer nahual Ketsakuespalin (dragón) de los que se tiene registro. 

Nahual Saga

Ixcuintla era un mestizo hijo de un fraile Canónico Franciscano y de una mujer indígena nahuala durante los inicios de la Colonia. Ixcuintla no fue concebido por amor sino como uno de los primeros intentos de los Canónicos, durante el Virreinato, de repeler la amenaza nahual criando a su propio ejército de Nahuales. 

Ixcuintla aprendió a liberar su nahual que el cual resultó sorprendentemente un dragón. Los Canónicos lo utilizaron en su campaña de ataques directos hacia las ciudades doradas pues debido a su naturaleza no era posible que fungiera como infiltrado ni como espía. 

Es incierto lo que llevó a los Canónicos perder control sobre él, pero estuvo involucrado una victoria en un cerro custodiado por nahuales donde crecía un árbol de naranjas doradas. Ixcuintla reclamó dicho cerro como pago por sus servicios y lo convirtió en su refugio personal. Desde ahí comenzó a aterrorizar al pueblo aledaño pidiendo tributos. Se cree que la avaricia y las naranjas doradas lo terminaron por cegar y corromper. 

Los Canónicos comenzaron a darle caza temiendo que se sublevara en su contra y lo sitiaron en su cerro. Finalmente, en 1607 un fraile fue capaz de sellarlo dentro mediante una maldición.  

Durante siglos, Ixcuintla siguió vivo dentro del cerro, custodiando su árbol y dando muerte a todo aquel quien pudiera entrar sin él poder abandonar jamás el sitio. Cuando los Canónicos fueron destronados de Ixcuintla, la protección del cerro quedó en manos de la ciudad dorada de Chikomostok quien cedió una guardia de nahuales especiales para que evitaran el escape de Ixcuintla, como sentencia por sus crímenes contra las Ciudades Doradas. 

Muchos años después, Cassandro ataca el baluarte de nahuales que mantenían encerrado a Ixcuintla, lo libera y lo recluta como uno de sus generales. 

Poderes y Habilidades

Según el Nahualcario Ixcuintla tiene las habilidades típicas de un dragón incluyendo vuelo, fuerza draconiana, resistencia, exhalar aliento venenoso y la capacidad de escupir fuego. 

La naturaleza de los poderes de Ixcuintla resulta, sin embargo, un poco más compleja. Dentro del contexto mágico, se le considera Draconismo a la habilidad de ciertos hechiceros de convertirse en dragones mediante magia, poder que es similar a la capacidad de transformación que pueda utilizar cualquier brujo para volverse un animal. 

Sin embargo, el draconismo, a diferencia de otras habilidades de transformación, demanda que el hechicero tenga en su sangre ascendencia draconiana. 

Ante la previa inexistencia de dragones nahuales, los altos estudiosos de Xinantécatl con asesoría de chamanes, brujos y miembros de El Orbe teorizaron que Ixcuintla debía tener ascendencia draconiana lo cual le concedió la capacidad del draconismo solo que en lugar de ponerla en práctica mediante los rituales clásicos de la magia occidental, accedía a dicha habilidad a través del nahualismo. 

Bajo esta teoría, se cree que todos los draconianos o quienes tienen ascendencia draconiana tienen por nahual a un dragón y que ya sea a través de magia o nahualismo, pueden ceder al don del draconismo. 

A su vez, pese a su falta de entrenamiento nahual, Ixcuintla alcanzó también la inmortalidad al alimentarse de las naranjas doradas que crecen en el árbol que custodia. Dichas naranjas, los mismos estudiosos de Xinantécatl teorizaron, surgieron de un mestizaje entre una fruta prehispánica no identificada y una semilla de las Manzanas de la diosa Idunn. De esta forma, las manzanas tendrían el don de conceder la inmortalidad a todo aquel que las comiera. 

El Árbol de Naranjas Doradas de Ixcuintla está registrado en el Nahualcario como una fuente alternativa aunque inaccesible a la inmortalidad.